túnel tarsiano y fibromialgia

Síndrome del Túnel Tarsiano y Fibromialgia

El síndrome del túnel tarsiano es cuando un nervio en el tobillo se aprieta o comprime, causando dolor, hormigueo o entumecimiento en el pie. Este nervio, llamado nervio tibial posterior, pasa por un pasaje estrecho en el lado interno del tobillo, conocido como túnel tarsiano.

Si el túnel se estrecha o se inflama, puede presionar el nervio y provocar estos síntomas.


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Aunque el síndrome del túnel tarsiano y la fibromialgia son afecciones distintas, pueden coexistir y complicar la calidad de vida de quienes las experimentan.

Síntomas del Síndrome de Túnel Tarsiano

Estos síntomas pueden afectar significativamente la calidad de vida de una persona, interfiriendo con la capacidad para realizar actividades diarias, como caminar, trabajar, hacer ejercicio o simplemente estar de pie.

1. Dolor

El dolor suele localizarse en el área del tobillo y el pie, especialmente en el lado interno. Puede ser agudo, punzante, ardiente o sordo y a menudo empeora con la actividad y mejora con el reposo. En algunos casos, el dolor puede irradiar hacia el talón, el arco del pie o incluso hacia los dedos.

2. Hormigueo

Sensación de “alfileres y agujas” que puede sentirse en la planta del pie y los dedos. Este síntoma puede ser constante o intermitente.

3. Entumecimiento

Sensación de falta de sensibilidad o adormecimiento en el pie, que puede hacer que sea difícil sentir objetos o cambiar la forma en que se camina.

4. Sensación de Ardor

Sensación de ardor o quemazón en la planta del pie, que a menudo es incómoda y puede interferir con la capacidad para caminar o estar de pie por largos períodos.

5. Debilidad Muscular

Puede haber debilidad en los músculos del pie, lo que afecta la capacidad para levantar el pie o los dedos, y dificulta actividades como caminar o subir escaleras. Esta debilidad puede provocar problemas al caminar, como una marcha inestable o dificultad para mantener el equilibrio.

6. Dificultad para Caminar

La combinación de dolor, hormigueo y debilidad puede hacer que caminar sea incómodo y desafiante. Las personas pueden cambiar su forma de caminar para evitar el dolor, lo que puede llevar a problemas adicionales en las articulaciones y los músculos.

7. Sensibilidad en el Tobillo

El área alrededor del tobillo puede ser sensible al tacto, y la presión en el túnel tarsiano puede intensificar los síntomas de dolor y hormigueo. A veces, la sensibilidad puede cambiar a lo largo del día, aumentando con la actividad y disminuyendo con el reposo.

8. Síntomas Nocturnos

Los síntomas pueden empeorar por la noche o al despertar, lo que puede interrumpir el sueño y causar malestar constante.

9. Síntomas Agravados por la Actividad

Actividades que implican estar de pie durante largos períodos, caminar mucho o realizar movimientos repetitivos con el pie pueden agravar los síntomas.



Causas del Síndrome del Túnel Tarsiano

Esta compresión puede ser causada por una variedad de factores, que a menudo afectan la forma en que el nervio se mueve o se expande dentro del túnel. A continuación, se detallan las principales causas del síndrome del túnel tarsiano:

1. Tensión Muscular y Espasmos

La tensión o espasmos en los músculos que rodean el túnel tarsiano pueden reducir el espacio dentro del túnel, ejerciendo presión sobre el nervio tibial.

2. Lesiones Traumáticas

Lesiones directas en el tobillo, como esguinces, fracturas o contusiones, pueden causar hinchazón o cicatrices en el área del túnel tarsiano. La hinchazón o las cicatrices pueden reducir el espacio en el túnel tarsiano y presionar el nervio tibial.

3. Inflamación y Enfermedades Artríticas

Trastornos inflamatorios como la artritis reumatoide o la artritis osteoartrítica pueden causar inflamación en las articulaciones del tobillo, lo que puede afectar el túnel tarsiano. La inflamación en el área puede aumentar la presión sobre el nervio tibial.

4. Deformidades Estructurales

Anomalías en la estructura ósea o en la alineación del pie pueden contribuir a la compresión del nervio tibial.

5. Tumores y Quistes

La presencia de tumores benignos o quistes en el área del túnel tarsiano puede ocupar espacio y presionar el nervio tibial. Estos crecimientos pueden reducir el espacio dentro del túnel y comprimir el nervio.

6. Sobrecarga y Uso Excesivo

Actividades repetitivas o el uso excesivo del pie, como en corredores o personas que pasan mucho tiempo de pie, pueden contribuir a la compresión del nervio tibial. El uso repetitivo puede causar inflamación y presión adicional en el túnel tarsiano.

7. Edema (Hinchazón)

Enfermedades que causan retención de líquidos o edema en el tobillo, como insuficiencia venosa o linfedema, pueden provocar hinchazón en el área del túnel tarsiano. La acumulación de líquidos puede reducir el espacio en el túnel y comprimir el nervio.

8. Cambios en la Biomecánica del Pie

Alteraciones en la forma en que el pie se mueve o distribuye el peso, como una marcha anormal o el uso de calzado inadecuado, pueden afectar el túnel tarsiano.

9. Factores Congénitos

Algunas personas pueden nacer con una estructura anatómica que predispone al síndrome del túnel tarsiano, como un túnel tarsiano anormalmente estrecho. Estas anomalías congénitas pueden hacer que el nervio tibial sea más susceptible a la compresión.

Relación del síndrome de túnel tarsiano con la Fibromialgia

La fibromialgia y el síndrome del túnel tarsiano son dos condiciones distintas que, sin embargo, tienen una relación estrecha debido a la forma en que se manifiestan además de que ambas pueden exacerbarse mutuamente.

Sensibilización al Dolor y Síntomas Neuropáticos

La fibromialgia se caracteriza por una sensibilización central al dolor, lo que significa que el sistema nervioso central es más sensible a los estímulos dolorosos. Esta hipersensibilidad puede hacer que el dolor neuropático causado por la compresión del nervio tibial en el túnel tarsiano sea más intenso y debilitante.

La coexistencia de ambas condiciones puede amplificar los síntomas neuropáticos que las acompañan (hormigueo, entumecimiento y sensaciones de ardor), haciendo que sean más molestos y persistentes.

Inflamación y Edema

Aunque la fibromialgia no es típicamente una enfermedad inflamatoria, se puede experimentar hinchazón y edema en los tejidos blandos. Esta tendencia a la hinchazón puede aumentar la probabilidad de desarrollar el síndrome del túnel tarsiano, ya que la inflamación en el área del túnel tarsiano puede comprimir el nervio tibial.

La inflamación y el edema (hinchazón) reducen el espacio dentro del túnel tarsiano, exacerbando la compresión del nervio y agravando los síntomas de la fibromialgia.

Estrés, Tensión Muscular y Problemas de Movilidad

El estrés crónico y la tensión emocional que acompañan a la fibromialgia, suelen causar músculos tensos y dolorosos, contribuyendo a la aparición de puntos dolorosos y espasmos musculares. Esta tensión muscular generalizada puede aumentar la presión sobre el nervio tibial en el túnel tarsiano, exacerbando el síndrome.

Además, el dolor generalizado y la fatiga asociados con la fibromialgia pueden causar una marcha anormal que puede alterar la biomecánica del pie y el tobillo, aumentando la presión sobre el nervio tibial y contribuyendo al desarrollo del síndrome del túnel tarsiano.


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Tratamiento del Síndrome del Túnel Tarsiano en Pacientes con Fibromialgia

Los tratamientos conservadores son la primera línea de intervención y pueden incluir diversas estrategias:

1. Reposo

Reducir o evitar actividades que agraven los síntomas puede aliviar la presión sobre el nervio tibial. Esto incluye limitar el tiempo de pie y evitar caminar largas distancias.

2. Modificación de Actividades

Ajustar las actividades diarias para reducir el estrés en los pies y los tobillos. Por ejemplo, alternar entre estar de pie y sentado y usar zapatos adecuados.

3. Calzado Adecuado y Ortopedia

El calzado adecuado puede ayudar a reducir la presión sobre el nervio tibial, mejorar la biomecánica del pie y proporcionar soporte y amortiguación, lo que es esencial para prevenir y aliviar los síntomas del síndrome del túnel tarsiano.

Características del Calzado Adecuado:

  • Soporte para el Arco: El calzado debe tener un buen soporte para el arco para mantener la alineación correcta del pie y reducir la tensión en el nervio tibial. Esto es especialmente importante para personas con arcos altos o pies planos.
  • Amortiguación Adecuada: Una buena amortiguación en la suela del zapato puede absorber el impacto al caminar y reducir la presión sobre el pie y el tobillo. Los zapatos con suelas de goma o materiales que absorben impactos son ideales.
  • Ajuste Correcto: Los zapatos deben ajustarse bien, sin ser demasiado apretados ni demasiado sueltos. Un ajuste adecuado ayuda a prevenir el deslizamiento del pie dentro del zapato y reduce la fricción y la presión en el área del túnel tarsiano.
  • Ancho y Espacio en la Punta: El calzado debe tener suficiente espacio en la punta para permitir que los dedos se muevan libremente. Los zapatos demasiado estrechos pueden comprimir el nervio tibial y exacerbar los síntomas.
  • Talonera Firme: Una talonera firme proporciona estabilidad al pie y evita el movimiento excesivo del talón, lo que puede reducir la presión sobre el nervio tibial.
  • Material Transpirable: Los materiales transpirables, como el cuero o las mallas sintéticas, ayudan a mantener los pies frescos y secos, previniendo la acumulación de humedad que puede causar irritación.

Consejos Adicionales sobre el calzado:

  • Evitar Tacones Altos: Los tacones altos aumentan la presión sobre la parte delantera del pie y el túnel tarsiano, empeorando los síntomas. Es mejor optar por zapatos con tacones bajos o sin tacón.
  • Reemplazo Regular del Calzado: Los zapatos desgastados pueden perder su soporte y amortiguación, por lo que es importante reemplazarlos regularmente. Un zapato que ya no proporciona el soporte adecuado puede aumentar la presión sobre el nervio tibial.
  • Probarse los Zapatos al Final del Día: Los pies tienden a hincharse a lo largo del día, por lo que probarse los zapatos al final del día asegura un ajuste cómodo y adecuado.

4. Plantillas Ortopédicas

Las plantillas ortopédicas son una herramienta fundamental en el manejo del síndrome del túnel tarsiano, especialmente si se asocia con la fibromialgia. Estas plantillas ayudan a corregir la alineación del pie, distribuir el peso de manera uniforme y proporcionar un soporte adicional que puede aliviar la presión sobre el nervio tibial.

Funciones de las Plantillas Ortopédicas

  • Proporcionan un soporte adecuado para el arco del pie, lo que ayuda a mantener una alineación correcta y reducir la tensión en el túnel tarsiano.
  • Ayudan a distribuir el peso de manera uniforme a lo largo del pie, lo que puede disminuir la presión en áreas específicas y reducir el riesgo de compresión del nervio tibial.
  • Muchas plantillas están diseñadas con materiales que absorben impactos, lo cual es crucial para reducir el estrés en los pies y tobillos durante actividades como caminar o correr.

Tipos de Plantillas Ortopédicas

  • Plantillas Personalizadas: Estas plantillas se hacen a medida según la forma del pie del paciente. Un podólogo o un especialista en ortopedia realiza un molde o escaneo del pie para crear una plantilla que se ajuste perfectamente, ofreciendo el máximo soporte y confort.
  • Plantillas Preformadas: Son plantillas estándar que se pueden comprar en tiendas de deportes o de productos ortopédicos. Aunque no son personalizadas, pueden proporcionar un buen nivel de soporte y son una opción accesible para muchas personas.

Materiales Comunes en Plantillas Ortopédicas

  • Espuma EVA (etileno-vinil-acetato): Ofrece una excelente combinación de amortiguación y soporte. Es ligera y duradera, lo que la hace ideal para el uso diario.
  • Polipropileno: Utilizado en plantillas rígidas, proporciona un soporte estructural fuerte. Es especialmente útil para corregir problemas de alineación.
  • Geles de Silicona: Ofrecen una excelente absorción de impactos y comodidad, siendo una opción popular para personas con dolor significativo en los pies.
  • Cuero: Utilizado a menudo en plantillas de alta calidad por su durabilidad y capacidad de moldearse a la forma del pie con el tiempo.

Beneficios de las Plantillas Ortopédicas en el Síndrome del Túnel Tarsiano y Fibromialgia

  • Reducción del Dolor: Al proporcionar un soporte adecuado y distribuir el peso, las plantillas pueden aliviar el dolor en los pies y tobillos, reduciendo la presión sobre el nervio tibial.
  • Mejora de la Función del Pie: Las plantillas pueden corregir la biomecánica del pie, mejorando la marcha y reduciendo el riesgo de lesiones adicionales.
  • Aumento de la Comodidad: La absorción de impactos y el soporte adicional hacen que caminar y estar de pie sea más cómodo, lo cual es crucial para quienes conviven con la fibromialgia.
  • Prevención de Complicaciones: Al corregir problemas de alineación y reducir la presión sobre el nervio tibial, las plantillas pueden ayudar a prevenir la progresión del síndrome del túnel tarsiano.

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5. Terapia Física

  • Ejercicios de Estiramiento y Fortalecimiento: Los ejercicios específicos pueden mejorar la flexibilidad y la fuerza en los pies y tobillos, reduciendo la tensión sobre el nervio tibial.
  • Terapia Manual: Técnicas de masaje y movilización de tejidos blandos pueden aliviar la tensión muscular y mejorar la circulación en el área afectada.

6. Acupuntura

La acupuntura es una terapia complementaria que ha ganado reconocimiento en el tratamiento de diversas condiciones de dolor crónico, incluido el síndrome del túnel tarsiano, especialmente con fibromialgia. Dentro de sus beneficios se encuentra:

  • Reducción del Dolor: La acupuntura puede aliviar el dolor en el túnel tarsiano y en otras áreas del cuerpo afectadas por la fibromialgia.
  • Mejora de la Función Nerviosa: Puede ayudar a reducir la compresión del nervio tibial y mejorar la transmisión nerviosa, aliviando síntomas como el hormigueo y el entumecimiento.
  • Reducción de la Inflamación: La acupuntura puede disminuir la inflamación en el área del túnel tarsiano, facilitando el alivio del dolor y mejorando la movilidad.
  • Alivio del Estrés y la Ansiedad: La fibromialgia está a menudo asociada con estrés y ansiedad. La acupuntura puede tener un efecto relajante, ayudando a mejorar el bienestar general.

Ahora te pregunto a tí … ¿Has tenido síntomas del sindrome de túnel tarsiano?

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