carta a quien no tiene fibromialgia

Una carta para quienes no tienen fibromialgia

Quiero abrirte una ventana a un aspecto de mi vida que, aunque invisible, ha influido significativamente en mi día a día: la fibromialgia.

Puede sonar a palabrería médica, pero quiero contarte lo qué significa realmente para mí. Forma parte de mi vida y aunque invisible a primera vista, se ha convertido en una parte esencial de mi existencia.


Únete a nuestro Grupo de Apoyo



No te preocupes si no tienes idea de qué se trata, o nunca habías escuchado esa palabra, a mi también me pasaba al comienzo; y creéme no es algo fácil de entender, ni siquiera aunque lo estés viviendo.

La fibromialgia no es solo una palabra complicada. Es como ese compañero de viaje que no eliges, pero que llega y decide quedarse contigo. Día tras día crea una serie de experiencias difíciles de explicar con palabras.

Imagina despertarte cada día sintiendo como si hubieras corrido un maratón, aunque solo hayas estado en la cama. Despertar con la sensación de haber pasado una noche sin dormir, incluso si has tenido tus ocho horas de sueño, los músculos duelen, las articulaciones protestan y la fatiga parece no tener fin.

Esto es lo que vivo regularmente, y aunque suene cliché, cada día es una nueva aventura con un conjunto diferente de desafíos.

La complicación radica en que la fibromialgia no sigue un guion preestablecido. No hay dos días iguales, y lo que funcionó ayer para aliviar el dolor, podría no ser efectivo hoy.

Es como un juego de adivinanzas constante, y adaptarse se vuelve una tarea diaria.

Algunos días son buenos, otros no tanto. Y sí, hay días en los que simplemente no tengo la energía para hacer cosas que antes eran “pan comido”.

La fibromialgia es diferente para cada persona que la padece, creando un rompecabezas complejo y único en cada individuo. No hay una fórmula mágica o una pauta que pueda seguirse, lo que añade una capa adicional de complejidad a esta condición.

Comprender la fibromialgia no es fácil, lo entiendo. Incluso para mí, que la experimento, hay momentos en los que todavía estoy tratando de entender qué está sucediendo. Cada día es un descubrimiento continuo de límites y resistencia.




Todo esto puede sonar como un lío, y créeme, a veces lo es. Pero aquí está la razón por la que te cuento todo esto: necesito que entiendas. No pido simpatía ni soluciones mágicas, solo quiero que sepas lo que hay detrás de mi día a día. Necesito tu apoyo y comprensión.

No necesitas comprender todos los matices de esta condición, pero tu disposición a caminar a mi lado ya es un regalo invaluable.

¿Aceptas el desafío de ser parte de esto a mi lado? No necesitas volverte un experto en fibromialgia, solo necesito que estés ahí. Hay días en los que una simple oferta de ayuda o un poco de paciencia hacen toda la diferencia.

A veces, solo necesito que alguien me escuche, que entienda que hay días en los que el cansancio me envuelve como una manta, y que mi sonrisa puede esconder un poco de dolor.

Pequeños gestos, como ofrecerme ayuda cuando estoy cansada o simplemente entender que hay días en los que necesito descansar, hacen una gran diferencia.

En esos días en los que la fatiga se convierte en un compañero constante y el dolor se intensifica, tu comprensión y apoyo se vuelven anclas que me mantienen firme.


Hackeando tu fibromialgia

Ebook – Diario de Síntomas


Hay días en los que el cansancio me abruma y solo necesito un poco de paciencia y comprensión. No siempre es fácil expresar lo que siento, pero sé que contigo puedo ser honesta y vulnerable.

Entiendo que puede ser difícil entender algo que no se ve. La fibromialgia es invisible a los ojos, pero sus efectos son reales.

No busco que cargues con mis problemas, solo quiero que sepas que estoy lidiando con esto y que tu apoyo hace que las cosas sean un poco más fáciles. Tal vez no podamos eliminar la fibromialgia por completo, pero podemos hacer que este viaje sea más llevadero juntos.


Sígueme en Viviendo con fibromialgia



Quisiera que sepas que tu disposición a aprender, tu comprensión y apoyo significan más de lo que puedes imaginar.

Solo quiero que estés ahí para apoyarme.

Gracias por tomarte el tiempo para leerme. Sé que esto puede parecer abrumador, y créeme a veces lo es. Pero contar con alguien como tú, que está dispuesto/a a escuchar y a intentar comprender, hace que la carga sea más liviana. Tu apoyo es una luz en este túnel a veces oscuro.

Aprecio mucho tener a alguien como tú en mi vida.

¿Qué quisieras adicionar a esta carta?

Déjame conocer tus opiniones. Escríbelas en los comentarios.

También puede gustarte...

1 Comentario

  1. JAIME PEÑA dice:

    Cada día inento entender esta enfermedad que padece mi esposa y una de las cosas que nos ha funcionado ha sido mejorar la calidad de sueño. Ella por las noches esta en un cuarto independiente sin ruidos y sin Luz en un ambiente confortable. Lo anterior al menos le ayuda a tener mas energía durante el día. Saludos.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.