Al no tener cura la fibromialgia, el principal objetivo del tratamiento será mejorar tu calidad de vida.
En esta búsqueda, muchas personas pasan la vida de médico en médico y de tratamiento en tratamiento, buscando la “píldora mágica” que los mejore.
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Y así caen en manos de charlatanes y oportunistas que se aprovechan del deseo de mejorar que tienen quienes padecen de fibromialgia.
Tengo fibromialgia
Como sabes soy médico y al igual que tú tengo fibromialgia, desde que mi médico me hizo el diagnóstico comencé a leer e investigar opciones para sobrellevarla y no darle la opción de afectar mi calidad de vida.
Lo primero que encontré es que aunque los medicamentos ayudan no son determinantes en la mejoría. Ahí entendí que debía alejarme un poco de lo que sabía de medicina y debía buscar otras opciones y es de ellas de las que te voy a hablar.
Pero no te asustes, puedes seguir leyendo sin prevención alguna. Acá no encontrarás referencia a ningún tipo de producto ni de servicio, es decir, no hay ningún tipo de interés comercial detrás de esta información, más allá de contarte lo que me ha funcionado a mí.
Mantén una actitud positiva
Muchos dirán, “para ti es fácil decirlo, no sabes cómo es vivir con fibromialgia“.
La verdad es que si lo sé y es por eso que te lo digo.
La fibromialgia es una enfermedad crónica, es decir que una vez que aparece nos acompañará siempre, así que es importante que aprendamos a convivir con ella.
Es importante aprender a “domarla”.
Programa tu cita
Soy una convencida de que somos el producto de nuestros pensamientos, por eso intento nutrirlos con frases positivas.
Así que en esa batalla diaria para “ganarle la partida”, comienzo mi día con este mantra:
“Sé feliz no porque todo sea bueno sino porque puedes ver lo bueno en todo”
Haz ejercicio
El ejercicio como parte del tratamiento de la fibromialgia es sin duda, la medida más eficaz.
Es posible que en este momento estés diciendo: Ejercicio con fibromialgia ¿A quién se le ocurre?
Si en alguna oportunidad has tenido una mala experiencia con el ejercicio, es normal que estés un poco renuente a esta idea.
Si todo me duele ¿Cómo pretenden que haga ejercicio?
Es importante que comiences con ejercicio de poca intensidad para evitar que los síntomas se exacerben.
Con el paso de los días verás como tus síntomas se vuelven más tolerables.
Pero ten en cuenta que si haces demasiado ejercicio en los días buenos, podrás convertirlos en días malos.
Si durante o luego de un ejercicio el dolor aumenta, la próxima vez reduce el tiempo o la intensidad de este.
Pero nunca suspendas la actividad física.
Lleva un diario de síntomas
Escribir es una buena forma dehacer consciente lo inconsciente.
Registra en tu diario:
- Tus actividades del día y la duración de éstas.
- La aparición de síntomas durante o después de realizarlas.
- Tu estado anímico.
De esta forma, hacer absolutamente objetivo lo que te ocurre cuando haces tus actividades diarias.
Te permitirá descubrir los vínculos entre los eventos diarios y tu nivel de síntomas.
Con el tiempo, te revelará que te empeora y que te mejora y, esto te permitirá adaptarte a las nuevas circunstancias.
Hackeando tu fibromialgia
Ebook – Diario de Síntomas
Mejora tus hábitos de sueño
Cuando tienes fibromialgia, dormir puede ser una pesadilla. Sé que sabes de lo que estoy hablando.
Existen 4 diferentes trastornos del sueño asociados a la fibromialgia:
- Dificultad para quedarte dormida.
- Despertarte demasiado temprano.
- Dificultad para permanecer dormida
- Despertar muy cansada (sueño no reparador)
Lo más grave de estas alteraciones es que forman un círculo vicioso con el dolor: un sueño de mala calidad aumentará los síntomas y la exacerbación de estos dificultará aún más el sueño.
Por eso es importante mejorar la higiene del sueño que no son más que los hábitos y pasos que debemos seguir para propiciar un sueño de buena calidad y un descanso adecuado.
Gestiona el estrés
¿Sabías que el estrés no es malo? Así como lo lees.
El estrés es una especie de alarma que dispara tu cuerpo cuando necesitas prepararte para protegerte de una situación que te pone en riesgo inminente.
Al identificar un posible peligro, el cuerpo libera una serie de sustancias, entre ellas el cortisol, que si se producen de forma permanente se vuelven perjudiciales para tu salud y es allí cuando el estrés se convierte en nuestro enemigo.
En vez de protegernos, se convierte en un disparador y exacerbados de los síntomas de la fibromialgia.
Por esto es importante que busquemos activamente diferentes formas para gestionarlo.
Algunas de ellas pueden ser:
Cuida tu dieta
Bien dicen que “somos lo que comemos”, afirmación súper acertada.
Nuestro bienestar así como muchos de nuestros malestares provienen de la dieta que consumimos.
Por esto es importante revisar nuestros hábitos alimentarios, para así sacar el mejor provecho de ellos.
Únete a grupos de apoyo
Si hay alguien que tiene toda la evidencia de los beneficios de pertenecer a grupos de apoyo, son los grupos de Alcohólicos Anónimos.
Grupos de personas que comparten su “mutua experiencia, fortaleza y esperanza para resolver un problema común y ayudar a otros a recuperarse”(1).
Ellos tiene un lema que podríamos adoptar nosotros también: “sólo por hoy, un día a la vez”. La idea es mejorar nuestro malestar por hoy, mañana lo resolveremos mañana.
Únete a nuestro Grupo de Apoyo
Los grupos de apoyo eliminan la sensación de estar sólo y te abren la visión al ver las experiencias de otros.
“De eso se trata, de coincidir con gente que te haga ver cosas que tú no ves. Qué te enseñen a mirar con otros ojos”.
Mario Benedetti
Sigue las recomendaciones de tu médico
Puede sonar muy extraño que siendo médica, coloque a tu médico de últimas.
Es que el tratamiento de la fibromialgia, lejos de lo que muchos piensan (especialmente los médicos), está más en manos del paciente que de los médicos.
Tu médico te formulará el tratamiento que considere más útil en tu caso particular, buscando controlar tus síntomas y mejorar tu calidad de vida.
Opciones alternativas
Hoy en día, existen muchas opciones cuando de manejo terapéutico se trata y la fibromialgia no es la excepción.
Lo importante siempre es que cualquier manejo alternativo que comiences, lo hagas de la mano de una persona experta y bien entrenada.
Algunas opciones pueden ser:
No te rindas
No te rindas, por favor no cedas,
Aunque el frío queme,
Aunque el miedo muerda,
Aunque el sol se esconda,
Y se calle el viento,
Aún hay fuego en tu alma
Aún hay vida en tus sueños.
Mario Benedetti
Te pregunto a tí, ¿Adicionarías algo más?
Déjame conocer tus opiniones. Escríbelas en los comentarios
(1) Fuente: Corporación Nacional de Servicios Generales de Alcohólicos Anónimos COLOMBIA
Es bueno leer e informarme de esta cruel enfermedad la llevo 10 años y cada día me apaga más y me discapacita de hacer cosas e visto médicos psicólogo terapeutas yoga y no hago ejercicio me dejan destruida aunque no lo creas todos nuestros cuerpos no trabajan igual cariños Marcela chile
Sufro de fibromialgia hace más de 20 años